Ir al contenido principal

RED.

Quererlo a el era como conducir un Maserati ultimo modelo por un callejón sin salida. Rápido como el viento, pasional como un pecado, terminando tan derepente. Quererlo fue como tratar de cambiar de opinión cuando ya estas cayendo. Como los colores de otoño tan brillantes justo antes de haberlo perdido todo. 
Perderlo fue azul, como nunca imaginé. 
Extrañarlo era gris oscuro, todo en soledad.
Olvidarlo es como tratar de reconocer a alguien que nunca has conocido.
Pero quererlo, sin duda, fue rojo..
Memorizarlo fue tan fácil, como saber todas las letras de tus canciones favoritas. 
Pelear con el era como tratar de resolver un crucigrama y darse cuenta que no existe una respuesta correcta. 
Lamentarlo, es como sin nunca hubieras querido entender de esa manera que el amor puede llegar a ser así de fuerte. 
Recordarlo a el viene en imagines en mi mente, y ecos que me dicen que ya es tiempo de dejarlo ir, pero seguir adelante es imposible cuando sigo teniendo todo dando vueltas en mi cabeza ardiendo en rojo.